¿El café es malo?¿Puedo incluir el café en un estilo de vida saludable? Hay pocas cosas más más ritualistas —y para muchos, más sagradas— que una taza de café por la mañana. Según la Organización Internacional del Café, en España consumimos unas 14.000 millones de tazas de café al año, lo que nos sitúa entre los 20 primeros países más cafeteros del mundo.

He preguntado a mis seguidores de Instagram, cuales eran las dudas que tenían acerca del consumo de café. En este artículo, os traigo RESPUESTAS SOBRE EL CAFÉ para resolver todas vuestras preguntas sobre la bebida más popular del mundo después del agua.

El café ha tenido durante décadas muy mala fama. Se le consideraba un gran estimulante asociado a la subida de la presión arterial y por tanto prohibido en hipertensos o pacientes cardíacos. Pero lo que hoy se sabe es que el café no es una bebida insana. Todo depende de:

1. La cantidad que se consuma
2. Tu estilo de vida

• El café es una bebida rica en cafeína y antioxidantes, como el ácido clorogénico, y su consumo regular y moderado proporciona beneficios para la salud (disminución del riesgo de diabetes, Parkinson, determinados tipos de cáncer, etc.).
• La cafeína es un estimulante del sistema nervioso central, disminuye la sensación de fatiga y mejora la concentración en adultos.
• Puede mejorar el rendimiento físico en deportistas por mejorar su estado de alerta y la contracción muscular.
• Tiene propiedades analgésicas por su capacidad vasoconstrictora y por su contenido en tiamina.

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) establece que la ingesta de hasta 400 mg por día (el equivalente a 4-5 cafés expresos) consumido a lo largo del día, no plantea problemas de seguridad para los adultos sanos. Un consumo excesivo de café, especialmente de cafeína, puede ocasionar problemas de salud (insomnio, irritabilidad, nerviosismo, incremento del trabajo cardíaco, adicción a la cafeína, etc.).

Su consumo se desaconseja en niños y adolescentes.

El café crea adicción. Un consumo crónico excesivo de cafeína* puede generar dependencia y es la base para entender el síndrome de abstinencia—que cuando se suspende abruptamente la cafeína, se genera una ‘tormenta de adenosina’ la cual se asocia a vasodilatación y a un aumento significativo en el flujo sanguíneo cerebral. Estos cambios fisiológicos son los responsables de la cefalea por supresión de cafeína.

*los síntomas pueden aparecer cuando se consumen cantidades muy pequeñas, del orden de 250 mg por día. Cada persona muestra cierta tolerancia a la cafeína.

El déficit de DAO es la carencia de una enzima digestiva encargada de eliminar una molécula, llamada histamina, presente en los alimentos. Si hay una exceso de histamina en sangre puede ocasionar de sensación cansancio o fatiga. Reducir el consumo de alimentos ricos en histamina a través de la dieta hará que te sientas mejor.

No recomiendo incrementar la ingesta de cafés para sentirse mejor.

Los efectos del café, y la cafeína en particular, en el rendimiento deportivo han sido ampliamente estudiados. La cafeína puede tener un efecto ergogénico, lo que significa que puede mejorar el rendimiento deportivo (mayor resistencia, acorta tiempos, reduce la sensación de fatiga y mejora la concentración).

Fuente: Goldstein et al. International Society of Sports Nutrition Position Stand: Caffeine and Performance.

Puede mejorar momentáneamente las funciones cognitivas, ya que al estimular el sistema nervioso central, hay una mayor producción de adrenalina, conduciendo a un mayor nivel de alerta temporal, mejorando la capacidad de concentración y eliminando la somnolencia.

Según la American Physiological Society, tomar cafeína después de entrenar puede mejorar la recuperación muscular si se consume junto a algún carbohidrato (3mg/kg de peso corporal).

La cafeína también mejora el flujo sanguíneo a los músculos y al corazón. Los músculos necesitan oxígeno para funcionar, por ello una buena circulación sanguínea equivale a una mayor potencia muscular. Así que si te tomas un café antes de salir a correr, tus músculos funcionarán mejor durante la siguiente hora y cuarto.

¿Es malo el café descafeinado?

El café es una bebida estimulante por su contenido de cafeína pero además es una mezcla compleja de más de mil compuestos bioactivos (muchos de ellos con propiedades antioxidantes). Su versión descafeinado puede ser una opción excelente si eres sensible o si simplemente prefieres evitar los efectos estimulantes de la cafeína.

Al entender los diferentes procesos de descafeinización (hay muchos tipos y unos más costosos de que otros, lo que resulta en un café descafeinado de especialidad) —y estar atento a cómo se han tostado los granos descafeinados, puedes elegir un café con toda la profundidad en el sabor y las notas de un grano especial sin la estimulación de la cafeína.

¿Es malo el café de máquina?

Existe una legislación especialmente rígida con la calidad de los productos de vending en el ámbito de la alimentación, muchos factores de producción afectan el sabor y por supuesto calidad del café. ¿Cómo se explica que cueste 40 céntimos algo que en los bares vale de media 1,40 euros? Muchas veces el café de máquina acaba siendo menos concentrado, y de un tipo inferior fundamentalmente por sus precios competitivos. El gran problema de las máquinas de vending radica en que, la mayoría de las veces, “no sabes lo que te estás tomando”.

Lo mismo pasa con los cafés monodosis (en cápsulas) es que algunos de estos productos pueden esconder azúcar, una cantidad de cafeína inexacta y riesgos medioambientales, ya que es difícil su reciclaje. A pesar de la introducción de puntos de recogida para el reciclaje apropiado de estos productos -Hoy en día solo en España cuenta con más de 1.000 centros*, con representación en todas las comunidades autónomas, en los que los consumidores pueden depositar las cápsulas Nespresso o Dolce Gusto, ambas fabricadas por la misma marca – siguen siendo muchos los consumidores que, bien por desconocimiento o bien por pereza, siguen tirándolas a la basura.

*Fuente: El Español